El Gobierno tiene previsto mejorar los ingresos tributarios implantando nuevas figuras (impuesto a la banca e impuesto a las empresas tecnológicas) y reformando algunos ya existentes, como el Impuesto sobre Sociedades, donde el Ejecutivo quiere implantar un tipo mínimo en el entorno del 15% para las grandes empresas a partir del cual no puedan efectuarse deducciones.

Así lo ha explicado recientemente la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, en una entrevista con la Cadena Ser. La titular de Hacienda ha afirmado que "no se trata de subir los impuestos a los ciudadanos, sino de crear espacios fiscales nuevos para el siglo XXI".

Tras descartar una subida del IRPF, Montero ha avanzado algunos de los planes del nuevo Ejecutivo en materia fiscal. En primer lugar, llevará al Congreso la conocida como 'tasa Google', un impuesto a las empresas tecnológicas que también quería poner en marcha el Gobierno del PP y que aportará, en el mejor de los casos, 2.100 millones en los dos próximos años. Además aprobará un "novedoso" impuesto a la banca, que tendrá carácter finalista, destinado a financiar la mejora en las pensiones y con el que se podrían recaudar 1.000 millones.

La idea del Gobierno es empezar a tramitar estos impuestos cuanto antes para que puedan entrar en vigor "lo más próximo posible" al inicio de 2019, porque al tratarse nuevas figuras tributarias no se pueden incorporar en los Presupuestos Generales del Estado del próximo año, que ya está preparando el Ejecutivo.

En el Impuesto sobre Sociedades, Montero se ha propuesto evitar la "arquitectura de deducciones" que hace que las grandes empresas reduzcan mucho el tipo por el que tributan, de tal manera que el planteamiento del Gobierno pasa por establecer un tipo mínimo del entorno del 15% a partir del cual las grandes empresas no puedan efectuarse deducciones.

"Si por ejemplo, estamos hablando de que tengan que pagar en torno al 15% no se puedan aplicar deducciones posteriormente. La realidad es que la contribución que hacen las empresas, y sobre todo las grandes empresas, que son las que tienen margen para poder aportar, no se adecua el tipo teórico (25%) al real que sale después de practicar toda una arquitectura de deducciones que tienen una gran complejidad y que hacen al final el tipo medio real del 12%".

"Hay diferentes propuestas sobre la mesa. Nos inclinamos por poner un tipo mínimo en las grandes empresas y que no se puedan aplicar deducciones posteriores, porque el tipo teórico no se adecúa al real después de aplicar toda una arquitectura de deducciones", ha explicado.

La idea es que, por ejemplo, con un tipo mínimo del 15%, el tipo real no se quede en una media del 12% con las deducciones que se aplican las grandes empresas.

Deducciones por promover la igualdad

Montero ha dicho además que el Gobierno quiere favorecer la igualdad desde la fiscalidad, por lo que se estudiará que puedan existir deducciones para aquellas empresas que apuesten por la igualdad efectiva de hombres y mujeres.

Otra medida que quiere poner en marcha es el "novedoso" impuesto a la banca, que tendrá un carácter finalista, destinado a financiar las pensiones. Montero ha dicho que esta iniciativa es conocida por el sector, porque así se recogía en el programa del PSOE, y aunque no espera que la banca reciba a esta figura con agrado, sí espera "comprensión" porque "tienen margen para aportar".

En el Impuesto sobre Sociedades, Montero se ha propuesto evitar la "arquitectura de deducciones" que hace que las grandes empresas reduzcan mucho el tipo por el que tributan, de tal manera que el planteamiento del Gobierno pasa por establecer un tipo mínimo del entorno del 15% a partir del cual las grandes empresas no puedan efectuarse deducciones.

"Si por ejemplo, estamos hablando de que tengan que pagar en torno al 15% no se puedan aplicar deducciones posteriormente. La realidad es que la contribución que hacen las empresas, y sobre todo las grandes empresas, que son las que tienen margen para poder aportar, no se adecua el tipo teórico (25%) al real que sale después de practicar toda una arquitectura de deducciones que tienen una gran complejidad y que hacen al final el tipo medio real del 12%".

"Hay diferentes propuestas sobre la mesa. Nos inclinamos por poner un tipo mínimo en las grandes empresas y que no se puedan aplicar deducciones posteriores, porque el tipo teórico no se adecúa al real después de aplicar toda una arquitectura de deducciones", ha explicado.

La idea es que, por ejemplo, con un tipo mínimo del 15%, el tipo real no se quede en una media del 12% con las deducciones que se aplican las grandes empresas.

Deducciones por promover la igualdad

Montero ha dicho además que el Gobierno quiere favorecer la igualdad desde la fiscalidad, por lo que se estudiará que puedan existir deducciones para aquellas empresas que apuesten por la igualdad efectiva de hombres y mujeres.

Otra medida que quiere poner en marcha es el "novedoso" impuesto a la banca, que tendrá un carácter finalista, destinado a financiar las pensiones. Montero ha dicho que esta iniciativa es conocida por el sector, porque así se recogía en el programa del PSOE, y aunque no espera que la banca reciba a esta figura con agrado, sí espera "comprensión" porque "tienen margen para aportar".

Fuente: elEconomista.es