2020 ha sido un año atípico. La alerta sanitaria mundial provocada por la expansión del COVID-19 y la consecuente declaración del estado de alarma en España en marzo de 2020 llevaron a una vorágine legislativa sin precedentes. En este contexto, las empresas se encuentran inmersas en un escenario incierto en el que la toma de decisiones juega un papel clave para la viabilidad futura del negocio. Desde el Especial COVID-19 de Garrigues hemos tratado de ir dando respuesta a muchas de las incógnitas que se han ido planteando. Ahora que este convulso 2020 está tocando a su fin, hacemos balance y repasamos las cuestiones legales más relevantes del año, desde todos los ángulos del derecho de los negocios, al tiempo que miramos hacia 2021, apuntando las tendencias a tener en cuenta en el nuevo ejercicio.

En esta última entrada repasaremos las áreas de REESTRUCTURACIONES E INSOLVENCIAS, LITIGACIÓN Y ARBITRAJE y PROPIEDAD INDUSTRIAL E INTELECTUAL

REESTRUCTURACIONES E INSOLVENCIAS

¿Cuáles han sido los principales hitos de 2020? 

Durante el año 2020 hemos asistido a una proliferación normativa de urgencia debido, en gran parte, a la crisis económica derivada del COVID-19. Así, podemos destacar el Real Decreto 463/2020 por el que se declaró el estado de alarma y se suspendieron los plazos procesales (situación que se prorrogó hasta el 4 de junio); o el Real Decreto Ley 16/2020, convalidado parlamentariamente por la Ley 3/2020, por el que, entre otras medidas, se suspendió el deber de solicitud de concurso de acreedores -inicialmente hasta el 31 de diciembre de 2020 y posteriormente prorrogado hasta el 14 de marzo de 2021- y se introdujo la posibilidad de modificar el convenio concursal o el acuerdo de refinanciación homologado. También cabe mencionar la distribución de fondos gubernamentales para reforzar la solvencia de empresas y autónomos (líneas y créditos ICO y CESCE), así como de empresas estratégicas.

En otro orden de cosas, el 1 de septiembre entró en vigor el Texto Refundido de la Ley Concursal, aprobado mediante el Real Decreto Legislativo 1/2020, de 5 de mayo. A pesar de tratarse de una refundición, dicho texto ha incorporado determinadas novedades. Especialmente destacable ha sido la refundición en el ámbito de la venta de unidades productivas, donde se ha incorporado una definición del concepto de “unidad productiva”, se ha limitado la responsabilidad del adquirente y se ha confirmado la competencia del juez del concurso para determinar la existencia de sucesión de empresa. Asimismo, durante este año determinados juzgados se han abierto a la adopción de la figura del administrador silente (silent administrator) para agilizar la venta de unidades productivas mediante pre-pack, nombrando a una suerte de monitor con carácter previo a la declaración de concurso que supervise que el proceso competitivo de selección del mejor postor se sigue adecuadamente.

¿Qué se espera para 2021? 

El nuevo año traerá consigo el fin de la moratoria para solicitar la declaración de concurso, que el Real Decreto Ley 34/2020, de 17 de noviembre ha prorrogado hasta el 14 de marzo de 2021. En esa misma fecha terminará también la posibilidad para el deudor de presentar una modificación del convenio de acreedores aprobado o del acuerdo de refinanciación homologado alcanzado con sus acreedores.

Asimismo, el 17 de julio de 2021 finalizará -salvo prórroga excepcional de un año- el plazo para que España trasponga la nueva Directiva 2019/1023, sobre marcos de reestructuración preventiva, exoneración de deudas e inhabilitaciones y medidas para aumentar la eficiencia de los procedimientos de reestructuración, insolvencia y exoneración de deudas. La transposición traerá consigo importantes novedades, en especial en el ámbito de la “segunda oportunidad”, en materia de reestructuración previa a la insolvencia, así como en la interrelación entre derecho concursal y derecho societario.

 

LITIGACIÓN Y ARBITRAJE

¿Cuáles han sido los principales hitos de 2020?

El impacto del COVID-19 en el cumplimiento de los contratos ha sido uno de los temas más relevantes de 2020 en el ámbito de la litigación. La pandemia también ha tenido efectos en el terreno del arbitraje, desde diversos puntos de vista: pudiendo convertirse en una oportunidad para revolucionar el arbitraje o por su impacto en el arbitraje de inversión.

Además, este año cabe destacar, al margen de la pandemia, la puesta en marcha y presentación del Centro Internacional de Arbitraje de Madrid, que nace con una clara vocación de convertirse en la institución arbitral española de referencia en el ámbito internacional.

También ha habido sentencias relevantes para el mundo del arbitraje, como la sentencia 46/2020, de 15 de junio, del Tribunal Constitucional, en la que recuerda y consolida su doctrina acerca de algunos conceptos importantes del ámbito de control de los laudos arbitrales por los tribunales, reforzando con ello la posición de España como sede de arbitraje.

¿Qué se espera para 2021?

Desde el punto de vista de la litigación, el tema clave seguirá siendo, al igual que lo ha sido en 2020, las controversias derivadas del impacto de la pandemia en el cumplimiento de los contratos. Como al inicio de cualquier ciclo económico de crisis, el 2021 será un año marcado por las disputas derivadas de incumplimientos contractuales.

PROPIEDAD INDUSTRIAL E INTELECTUAL

¿Cuáles han sido los principales hitos de 2020?

El impacto del COVID-19 ha conmocionado a la industria del entretenimiento: rodajes interrumpidos, conciertos cancelados o pospuestos, librerías clausuradas temporalmente y ferias y festivales aplazados. La normativa aprobada con motivo del COVID-19 en esta área ha ido dirigida principalmente a paliar los efectos de la pandemia en cuestiones procedimentales (p. ej., ante las oficinas de propiedad intelectual e industrial). Salvo cuestiones puntuales -como la posibilidad de flexibilizar el destino de los fondos asistenciales de las sociedades de autores y artistas para auxiliar a sus miembros-, no ha afectado a cuestiones de calado.

Más relevante como estrategia de país ha sido la aprobación de generosos incentivos fiscales a la producción audiovisual a través de la reforma parcial del artículo 36 del Impuesto de Sociedades.

Al margen de la pandemia, y dentro de la estrategia España 2025 que persigue convertir a nuestro país en un referente de la producción audiovisual, la publicación del anteproyecto de Ley General de Comunicación Audiovisual (DSCA) el pasado 6 de noviembre ha supuesto uno de los grandes hitos del año.

Cabe destacar también la aprobación por el Parlamento Europeo el 20 de octubre de 2020 de tres informes que estudian cómo regular la inteligencia artificial para impulsar la innovación, el respeto de estándares éticos y la confianza en la tecnología. Por último, la Propuesta de Reglamento de Mercados Digitales y la Propuesta de Reglamento de Servicios Digitales de la Comisión Europea, todavía en fase embrionaria, persiguen reequilibrar los derechos y obligaciones de los actores que confluyen en el entorno digital.

¿Qué se espera para 2021?

En 2021, veremos culminar la nueva Ley General Audiovisual y, también, la transposición en España de la Directiva de Derechos de Autor en el Mercado Único Digital que, en tiempos difíciles para autores y artistas, incluye mecanismos de renegociación de los contratos para mejorar los royalties derivados del streaming. El proceso legislativo en Europa para la aprobación de los reglamentos de mercados y servicios digitales, así como las normativa europea sobre inteligencia artificial, seguro darán que hablar.

Fuente: Garrigues.com