La agresividad y la presión en las llamadas o visitas comerciales son inaceptables, y cualquier empresa que quiera tener una buena reputación en el mercado debe de eliminarlas de su proceso de ventas.
En un mundo donde la Sostenibilidad y la Responsabilidad Social Corporativa están en constante expansión, es crucial examinar el impacto real que tienen ambas en las interacciones comerciales entre vendedores y clientes. Para ello, en este artículo, exploraremos la importancia de la venta ética y analizaremos por qué la venta agresiva y la venta a presión no solo son inaceptables, sino que también son contraproducentes para cualquier empresa comprometida en la construcción de relaciones sólidas y duraderas con los clientes.