La facturación electrónica será obligatoria desde 2015 cuando la operación supere los 5.000 euros.

Ya en 2014, permitirá aflorar deudas cruzadas y bloquear fondos si la empresa debe a las AAPP.

La factura electrónica servirá a Hacienda para atajar de una vez el problema de los impagos de las Administraciones a sus proveedores y, a su vez, el de las deudas de estos con sus acreedores públicos. El secretario general técnico del Ministerio, David Mellado, incidió ayer en que, con su puesta en marcha, España va más allá del necesario saneamiento de las cuentas públicas y se autoexigirá un nivel de morosidad bajo a partir del año que viene.

Fuente: El Economista - 21/11/2013