La reforma laboral refrendada por el Congreso de los Diputados tiene como principales objetivos reducir la temporalidad y la precariedad laboral.
Esta reforma, que fue fruto del acuerdo entre el Gobierno, la patronal y los sindicatos, entró en vigor el pasado 31 de diciembre, aunque algunos de los puntos más relevantes no se aplicarán hasta el próximo 31 de marzo. A continuación, realizaremos un repaso a los nuevos modelos de contratación, que buscan mejorar las cifras de temporalidad del mercado laboral español (el 26% de los asalariados son temporales en nuestro país, un nivel sólo superado en Europa por Países Bajos). Hay que recordar que esta ha sido una de las principales exigencias de la Comisión Europea para liberar en primavera otros 12.000 millones de euros de los Fondos Europeos de Recuperación, Transformación y Resiliencia.