Actualmente una compañía que se ve en la necesidad de captar capital para la inversión en un nuevo proyecto o bien para financiar la expansión de su negocio, se encuentra con cuatro escenarios posibles:
1º.- Realizar una ampliación de capital, otorgando al nuevo inversor la condición de accionista con los derechos económicos y políticos inherentes a la misma.
2º.- Realizar una emisión de deuda, donde el inversor que adquiera los títulos de deuda recibirá una remuneración económica en función al tipo de interés que se acuerde y durante un plazo previamente establecido, momento en el cual la compañía deberá devolver el capital que recibió prestado.
3º.- Solicitar la financiación a una entidad bancaria.
4º.-Acudir a plataformas de Crowdfunding, donde lo usual es remunerar al inversor con un derecho de uso del producto o servicio que se pretende financiar.
La revolución del blockchain y de las criptomonedas supone tanto para las Startups como para las PYMES la creación de un nuevo nicho donde captar financiación para sus proyectos sin necesidad de acudir a la tradicional financiación bancaria, dándoles la posibilidad de captar fondos mediante la emisión de acciones o títulos de deuda sin los cuantiosos costes que supone acudir a los mercados bursátiles tradicionales que de facto alejan a todas las compañías que no tengan un considerable tamaño y músculo financiero de estas formas de financiación.